martes, 27 de septiembre de 2011

“La Voz de los Niños” (Encuesta)


¿Cuántos niños están contentos con la educación que reciben? ¿Cuántos niños usan internet para hacer sus tareas? Si la opinión de los niños se tomara en cuenta en materia educativa, ¿qué cambiarían ellos de la educación que reciben?

La semana que pasó estuve en la presentación de resultados de la encuesta “La Voz de los Niños” realizada por el Grupo Impulsor Inversión en la Infancia, en asociación con Ipsos Apoyo. El primer tema de esta encuesta ha sido la percepción que tienen los niños peruanos sobre la educación que reciben. Esta es la primera de una serie de encuestas dirigidas a las niñas y niños peruanos, que tiene como objetivo conocer su visión sobre distintos temas que los afectan.

La encuesta fue realizada entre 1202 niños y adolescentes, divididos en un grupo de niños y niñas de 8 a 12 años, y otro de 13 a 18 años, cubriendo las 24 regiones del país.

Los resultados son muy interesantes y a la vez desalentadores. Es penoso saber que el problema no es sólo de infraestructura, de salones en donde no se puede estudiar, de colegios a los que no se puede llegar, es también de contenido, de calidad en el material que reciben. Es también un problema de voluntad, política principalmente. Algunas de las conclusiones fueron:

La educación no aparece como uno de los 5 principales problemas del país, pero sí como solución para estos problemas.

Se exige educación de calidad para TODOS.

Dos tercios de los escolares piensan que la educación que reciben es buena. Esta percepción podría deberse a que existe un riesgo de baja expectativa por autocomplacencia y/o desconocimiento de otras realidades, no tienen con qué comparar.

A la mayoría de los escolares les agrada ir al colegio, porque les gusta aprender.

Un profesor es ideal si posee, entre otras, la siguiente característica: “asiste a clases todos los días”. Imagínense, algo que es básico: la presencia del profesor en aula, es un ideal. En la caso de zonas rurales la realidad es otra, la distancia a la escuela tanto para alumnos como para profesores es muchas veces injustamente larga.

Las carreras más populares entre los escolares varones es la ingeniería, y entre las mujeres la medicina.

Un tercio de los niños y adolescente sienten que no será fácil aprobar el año.

Mejorar la enseñanza de inglés y matemáticas es una demanda extendida entre los estudiantes.

Aquí las 10 principales conclusiones:

Más allá de nuestra percepción es necesario escuchar a los niños, saber qué piensan, cuál es su opinión acerca de lo que sucede a su alrededor. Hay que invitarlos a pensar en ella y a anhelar algo mejor, los niños no son seres aislados a todo lo que sucede, al contrario lo ven y oyen todo y comienzan a formar su pensamiento en función de ello. ¿Dejaremos que crean que la educación que reciben en los colegios estatales está bien? ¿Vamos a tener que pagar cantidades de dinero que no todos tenemos para que puedan recibir educación mínimamente buena? Conversemos con ellos, escuchemos a los niños, ellos tienen mucho que decir.

La encuesta demuestra que los niños no son tomados en cuenta en temas que los toca directamente. Su voz no es escuchada y no se les consulta a la hora de tomar decisiones en temas donde ellos deberían ser los protagonistas.

La próxima encuesta nacional será sobre la percepción de los niños y niñas acerca de “la violencia”. Qué pensarán ellos acerca de toda la violencia desmedida en la que viven actualmente. Hagamos algo antes de que crean que ser violento es natural, es normal y es una forma de vivir.

Hablamos,
Lu

lunes, 12 de septiembre de 2011

Invictus (William Ernest Henley)

Desde la noche que sobre mí se cierne,
negra como su insondable abismo,
agradezco a los dioses, si existen,
por mi alma invicta.

Caído en las garras de la circunstancia,
nadie me vio llorar ni pestañear.
Bajo los golpes del destino,
mi cabeza ensangrentada sigue erguida.

Más allá de este lugar de lágrimas e ira
yacen los horrores de la sombra,
pero la amenaza de los años,
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.

No importa cuán estrecho sea el camino,
cuán cargada de castigo la sentencia.

Soy el amo de mi destino
soy el capitán de mi alma